El viento se torna más frío. Los árboles comienzan su cambio de color, adoptando toda la gama de tonos cálidos para después ir desvistiéndose poco a poco. La naturaleza se vuelve más perezosa, preparándose para el largo sueño de invierno. Los días se hacen más cortos, el verano queda cada vez más lejos. El sol y la playa apenas son ya un recuerdo lejano. Pero ella no. A ella la tengo muy presente. Quizá también esté sentada sobre un suelo alfombrado de hojas secas, pensando en mí, echando de menos el sol y la playa. Contando los días que faltan para el verano. Descontando los días que faltan para que volvamos a vernos.
9 comentarios:
Una ilustración preciosa para una historia muy bonita.
Gracias. Supongo que es algo que nos ha pasado a todos al menos una vez en la vida, no?
Me gusta, sobretodo el efecto del viento!! Gracias por tu comentario, Miguel!
Saludos!!
Se nota que es una estación inspiradora. Esta ilustración huele a café calentito y tararea el "November" De Tom Waits.
Un abrazo!
Pero porque todo el mundo pinta tan bien en digital y yo no!! >.<
Preciosa la ilustracion, me gusta esa mirada melancolica, eres tu de jovenzuelo? jaja
Muy chula la ilustración y evocadora,sí
;)
Muchas gracias a todos por vuestros comentarios. Sin ellos, este blog no tendría mucho sentido.
Ninde: Claro que soy yo... :P ¿A ti no te ha pasado nunca algo asi?
Saludos.
Sí, sugiere sobre todo una palabra: evocadora....
Un abrazo, Miguel.
Me gusta la mirada de tu personaje y los tonos cálidos de tu ilustración.
Saludos, llego a tu blog por un comentario que le dejaste a Ninde. ¡Hasta pronto!
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